Hay unos poetas, los que componen letras y músicas, que son lo más parecido a la literatura que se cuece en gran parte de la sociedad.
Si alguien dijo alguna vez que las letras eran lo peor que la había pasado a la música, no dudo de que estaba en lo cierto. Una buena letra resta importancia la música, o l oque e slo mismo, una música sencilla, si tiene una buena letra, puede ser una gran obra.

Tú no tenías, ni tienes, ninguna de las dos. Tú no tienes alma de artista, de poeta, de mí. Tú no eres nada. Nada. Nada a mí.

Yo, que tan avanzada fui para que ahora mis avances se tornen moda, y así todos escuchen música clásica, lean a Rossetti, malhablen del Arte, intenten captar segundos y porten una grandes y llamativas gafas (Que hace un año fueron tachadas de obsoletas y de mal gusto) Yo, que veo que cuando se populariza nuestras formas, no encuentro nsa nuevo en ti. Nada. Nada. (O nada nuevo bueno, salvo el saber que hay ciertas cortas en las que una debe ser racional y actuar más por la magia que por el fluir)

Así pues sentencio, que no eres nada. Podría recurrir a frases de poesías en tiempos de crisis, pero sería demasiado sencillo adivinar en ellas mi verdadera opinión, así que, espero que dejes lugar a la imaginación y te muerdas por dentro, en la angustia escondida de la falta de valor para saber el remitente. No es nada.

Y podría poner esa nada en mayúsculas, pero no alcanzas Su nivel como par honrarte con ello. No eres nada, ni luchador, ni inconformista, ni aventurero, ni atrevido, ni perspicaz, ni inocente, ni modesto, ni valiente, ni Arte.

Que no eres nada, nada, nada, que no pueda ser por mi misma.
Ni adiós, ni gracias, ni dolor, no morderme las ganas
Solo el saber, saber la posibilidad de que existes. Como nada.