Nos pasamos la mitad de la vida pensando el futuro, y , sin darnos cuenta, se nos viene poco a poco encima.
Cada día está más cerca, hasta que, llega un momento, en el que nos encontramos con el futuro a las espaldas, en el que. Nos invade la nostalgia, y maldecimos todo el tiempo que pasamos planeando las cosas, los acontecimientos. Acontecimientos,que nunca tuvieron lugar ni llegaron a producirse de la manera en la que esperábamos.
Cada segundo se aproxima más, cada momento, no existe el presente,solo hay un reciente pasado, y un actual futuro.
Y ahora, a pesar del corto tiempo, miro atrás, y veo aquel futuro que siempre había deseado, los veo a ellos, a su música, a la primera canción, a la primera fotografía, a las tardes que olían a chicle de fresa, a los momentos, a las risas, a las horas de estudio y a las fiestas, a los llantos y a las sonrisas, a las idas de olla adolescentes, a las conversaciones para salvar el mundo y a las personas que lo han salvado.
Y poco a poco, el pasado se va aproximando más al día de hoy, y, cuando cierro los ojos, estoy en el futuro, en un futuro tan lejano, tan inalcanzable, que empieza hoy mismo.
Y las preocupaciones de mañana, pasan a ser nostalgia del ayer.
Emily´s (PPP)
Y mientras, sumidos en la entropía, en la decadencia y después.... ¡zas! En toda la boca. Saludos.
ResponderEliminarLa vida es un sin fin de puertas pasando delante nuestra, algunas estan escondidas, las hay pequeñas, grandes y con alambre de espinos, pero todas sirven para una cosa, entrar en una nueva sala de puertas hasta que ya sólo estés en una sala oscura con una única puerta abierta de par en par, pero con una sola dirección.
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