Y nos es solo una voz, ni unos acordes, ni cinco personas derrochando energía, son las cientos de personas que hay abajo, dándosela.
Ayer volví a vivir esa atracción musical y a revivir esos buenos momentos.
Ayer, recordé muchas cosas pasadas, e imaginé unas tantas otras.
Ayer, volví a saber donde estaba mi sitio.
Ayer, tuve unos de los subidones de adrenalina que hacía mucho que no sentía.
Y que el éxtasis experimentado tras pasar por ellos, te deja en una nube hasta el día siguiente.
Resaca de noche de concierto.
la música mueve la sangre :)
ResponderEliminarPero que terapéutica es la música, joder!!! :))
ResponderEliminarBesos enormes
geniales! yo lo vi en Málaga el 18 :)
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