martes, 21 de mayo de 2013

"Quizás el autor solo deba hacer eso que le lleva a escribir"
Esta idea me estuvo acompañando durante todo Mayo.
Siempre tendremos historias que inventarnos, podemos tirar de la imaginación, de preguntas retóricas' de respuestas que nunca nos atrevimos a hacer. Yo era demasiado egoísta como para contar cosas que no me pasasen a mí.
Nunca había sentido miedo, nunca había estado tan atrapada entre el "¿Qué?" Y el "¿Cómo?" Pero lo que más que preocupaba era el "¿Cuándo?" Y que la respuesta fuese "Nunca"

Los soñadores nos enamoramos de las historias, de lo que puede salir de ellas, de lo que pasará. Vamos cuatro capítulos por delante cuando aún no se ha estrenado el piloto.
Así vamos tejiendo historias, cuentos, situaciones, relatos que no pasarán y personas que no existen. Así nos creamos nuestro universo paralelo, en el que somos otra persona, que responde a otro nombre, que vive otra vida y que hace otras cosas.
Así, sabiendo que va a doler, destruimos nuestra verdadero "Yo" para convertirnos en quien escribe.
Son decisiones de segundos, de milésimas que nos cercan, una delimitación, una figura que se adapta poco a poco a nuestra forma, que se fusionan con nuestro cuerpo.... Y que cuando queremos crecer, nos damos cuenta de que aprietan demasiado....
Y no podemos deshacernos de (en) ellas

No hay comentarios:

Publicar un comentario